Praga es uno de los destinos más románticos del mundo, que derrocha cultura y belleza por todos sus rincones. Por ello, es un destino perfecto para enamorarse desde que ponemos un pie allí por primera vez. Visitamos los rincones más especiales y sorprendentes de Praga, a continuación.
6 lugares que no debes perderte si visitas Praga
La capital de la República Checa cuenta con lugares magníficos y espectaculares que son bien conocidos por todos los que la visitan cada año. Sin embargo, en esta ocasión, no queremos mostrarte sus lugares más célebres, sino que hacemos una interesante recopilación de los rincones más especiales y sorprendentes de la ciudad. ¿Estás preparado para este interesante viaje?
1. Pabellón Hanavsky, donde los cuentos de hadas se hacen realidad

El Pabellón Hanavsky es un edificio hermoso a la vez que sorprendente, sobre todo cuando visitas Praga por primera vez. Se trata de una edificación especialmente construida para la Exposición Universal del año 1891 y que está diseñada en hierro forjado, cemento y cristal.
Hoy en día ha sido reconvertido en un curioso y hermoso restaurante en el que podrás degustar las delicias más típicas de la gastronomía checa, incluidas sus conocidas cervezas.
2. Cripta de San Cirilo y San Metodio, la historia de dos héroes

Este lugar alberga uno de los episodios históricos más sonados de toda la ciudad de Praga, pues en ella se refugió el comando militar que acabó con la vida de un dirigente nazi muy famoso.
Tras una larga resistencia y tras soportar los bombardeos del ejército nazi, estos dos héroes checos tomaron la decisión de suicidarse antes de entregarse a sus enemigos.
3. Torre de Petřín, una panorámica única de la ciudad de Praga

A simple vista parece una réplica en miniatura de la conocidísima Torre Eiffel de París. Pero este parecido tan evidente no es ni mucho menos una causalidad, ya que se construyó tan sólo dos años después de la famosa torre parisina.
Aunque sólo cuenta con 60 metros de altura, la Torre Petrin destaca por las vistas espectaculares que ofrece de toda la ciudad de Praga desde lo más alto de su cúspide.
4. Esculturas del Museo Kafka, todo un símbolo de la historia checa

Hablar de la República Checa es, necesariamente, hacer una alusión a las fabulosas obras literarias de su autor más célebre: Franz Kafka. De hecho, esta es una de las principales razones por las que deberías visitar Praga pronto.
Este curioso y llamativo conjunto escultórico se encuentra a la entrada de su museo, y representa una imagen muy curiosa, la de dos hombres orinando sobre el mapa de la República Checa.
Se trata de una obra de David Cerny en la que lo más curioso es que los chorros escriben una a una las palabras de varias citas de conocidas escritores. Además, siempre que se solicite con antelación, el turista puede elegir que las esculturas escriban lo que él pida.
5. La Iglesia inacabada, la imperfección también resulta sorprendente

Su primera piedra se colocó nada más y nada menos que en el siglo XIV, y su objetivo era convertirse en un lugar de culto para todos los que la visitan. Y así fue, pues su impresionante bóveda de 34 metros de altura no deja indiferente a ninguno de los turistas que la visitan.
Su imponente altar tiene nada más y nada menos que 29 metros de altura, y está coronado por una magnífica cruz de 7 metros.
6. La Capilla de los Espejos, lujo y elegancia en el mismo templo

Construida en mármol y estuco, esta capilla cuenta con decenas de espejos en todos sus rincones. Esta pequeña iglesia está dentro del Klementinum y es un lugar ideal para los amantes de la música clásica. Además su mayor curiosidad es que su órgano fue utilizado por el mismísimo Mozart para tocar algunas de sus célebres piezas.