La Ciudad Eterna puede ofrecernos arte, historia, ocio y cultura durante una eternidad, nunca mejor dicho. No obstante, también es posible disfrutar Roma en 3 días escogiendo los lugares imprescindibles y haciendo una buena planificación de nuestro tiempo. La Fontana di Trevi, el Coliseo, la Plaza de España, la Capilla Sixtina… Lugares imprescindibles en esos tres días en los que podremos saltar de la esencia del Imperio Romano al ambiente bohemio marcado por los artistas del barrio de Trastevere, pasando por la religiosidad del Vaticano.

El Imperio Romano: el Coliseo y el Foro Romano

Aunque Rómulo y Remo sean el inicio de la historia de la ciudad, el Imperio Romano es la época que más huella dejó en la ciudad y en toda Europa. Buena prueba de ello es el Coliseo. Es uno de los monumentos de la Antigua Roma mejor conservados, convirtiéndolo en una de las atracciones turísticas que más visitantes atrae.

El buen estado de conservación, la magnificencia del Coliseo y los distintos usos que fue adquiriendo a lo largo de la historia lo convierten en el símbolo de la ciudad. Bautizado originariamente como Anfiteatro Flavio, estaba diseñado para albergar a 50.000 espectadores y destinado, principalmente, a acoger espectáculos de lucha de gladiadores. Se trata de uno de los iconos de la época más gloriosa de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1980 y una de Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.

Siguiendo con la historia del Imperio Romano, y muy cerca del Coliseo encontraremos el Foro Romano. Era el centro neurálgico de la Roma Imperial, el lugar donde se encontraban las instituciones de gobierno, mercado y religión. Hoy en día aún nos podemos hacer una idea del uso que la sociedad romana hacía de los espacios públicos hace unos dos mil años.

El arte de Miguel Ángel en el país más pequeño del mundo

Aunque solo podamos disfrutar de Roma durante tres días, debemos cambiar de país y visitar la Ciudad del Vaticano. Se trata del país más pequeño del mundo. En tan solo 44 hectáreas se albergan lugares imprescindibles en la lista de cualquier visitante: la Plaza de San Marcos, la Basílica, los Museos Vaticanos…

Destaca entre todos estos lugares imprescindibles la Capilla Sixtina. En una parte de su bóveda observaremos El Juicio Final, el fresco realizado por Miguel Ángel que le otorga fama mundial a la capilla. Se trata de una enorme obra, de casi 14 por 12 metros donde se representa el pasaje del Juicio Final, recogido en el Apocalipsis según San Juan.

 La atmósfera bohemia de Trastevere

Roma también es actualidad, vida bohemia, elegancia, moda… El barrio de Trastevere es el centro del ocio nocturno y la auténtica gastronomía italiana. Puede que sea el lugar perfecto para callejear, hacer una parada y dejarse conquistar por las delicatessen italianas: cafeterías, restaurantes y, sobre todo, buenas heladerías artesanales.

Y si tres días en Roma no son suficientes, siempre nos queda visitar la Fontana di Trevi para lanzar una moneda en esta magnífica fuente. Arrojar una moneda de espaldas con la mano derecha a la fuente presidida por el dios Océano nos asegurará volver a la Ciudad Eterna.