Durante cientos de años personas de todo el mundo han recorrido los kilómetros que conforman el Camino de Santiago hasta la ciudad gallega en la que la historia nos dice que este Santo está enterrado. Atravesando alguno de los lugares más bellos de España, los peregrinos recorren y contemplan los mismos paisajes que cientos de años atrás hiciera el santo.

El Camino de Santiago ofrece algo único para todo el mundo. Puede que te haga reír, puede que te fortalezca. Puede que haciéndolo hagas nuevas amistades o descubras una nueva forma de conectar con la naturaleza y apreciar su belleza. Pero lo que es casi seguro, es que siempre te da aquello que necesitas, incluso cuando no sabes que lo haces.

Existen diferentes formas y razones de hacer el Camino de Santiago que dependen de tantos factores como casi, las personas que se animan a hacerlo. Algunos prefieren hacerlo al más puro estilo peregrino, mochila en mano y saco de dormir a la espalda. Es quizás la estampa más tradicional y la que más personas asocian con el camino.  Otros, se animan a hacerlo en bicicleta (la opción más dura a pesar de lo que pueda parecer). Y aunque las jornadas entre parada y parada se hacen más cortas (dependiendo del itinerario programado), la recompensa al llegar a Santiago es la misma. Esa satisfacción que sólo un peregrino puede comprender.

Lo que muchos desconocen antes de aventurarse a hacer tal singular y único recorrido por el norte de España es que el Camino de Santiago es también una experiencia arquitectónica, gastronómica y espiritual que muchos peregrinos prefieren disfrutar de una forma diferente. Si este es tu caso,  también existen alternativas a la clásica.

Desde restaurantes con la gastronomía más exquisita de la zona hasta hoteles con encanto, alejados de los tradicionales albergues del peregrino, alojamientos pensados para un Camino de Santiago diferente en paradas únicas como Sarría (uno de los puntos más populares del camino, y punto de salida de cientos de peregrinos ya que es lugar de inicio mínimo para poder conseguir la Compostelana), pero también en todos los núcleos urbanos que salpican el camino por las provincias de Pamplona, Logroño, Burgos, Palencia, León y Lugo.

Hayas hecho, vayas a hacer o estés planificando recorrerlo en un futuro, déjate seducir por la experiencia única de descubrir una parte de España y de ti que no te imaginabas o desconocías.