Vietnam y Camboya se han convertido en dos de los destinos preferidos para aquellos que quieren conocer la belleza exótica de lo natural

Las ganas de viajar hasta el Sudeste asiático están de moda. Esto ha causado el nacimiento de muchas ofertas que atraen a múltiples viajeros. Son muchas ya las agencias especializadas que trabajan para ofrecer planteamientos turísticos satisfactorios para garantizar experiencias únicas. Directia Travel es una de ellas. Sus profesionales trabajan apasionadamente para proponerte ejemplos y alternativas de viajes a Vietnam, para que cada persona pueda adaptarlo a sus necesidades turísticas y personalizar la experiencia de viajar esta zona. Pero si tienes pensado viajar a Vietnam y dispones de límite de tiempo adaptable, es muy recomendable incluir unos días en Camboya. En esta agencia se pueden encontrar varios ejemplos de viajes a Vietnam y Camboya.

Vietnam

Este país es un lugar con muchísimo por descubrir. Sus paisajes espléndidos llaman la atención de todo tipo de viajeros, tanto de aquellos que quieren explorar regiones montañosas como de aquellos que prefieren saber cómo es la vida diaria de las ciudades céntricas y su gente. Ho Chi minh es una ciudad vietnamita que goza de un contraste que ejemplifica la riqueza del país mezclando tradición y modernidad.

La zona norte de Sapa es la más rural del país, repleta de arrozales y mercados locales que huelen a la inexistencia del paso del tiempo; la ciudad de Hanoi, por el contrario, es un atractivo turístico repleto de motos. El clima en Vietnam varía mucho en función tanto de la época del año como de la zona del país, así que es importante tenerlo en cuenta a la hora de preparar bien las vacaciones.

Seguir hasta Camboya

Lo bueno de poder visitar ambos países de una sola vez es el descubrimiento de descubrir dos culturas muy distintas en pocos días. Y es que Siem Reap, capital camboyana, está a solo 1 hora de avión de la capital de Tailandia. Uno de los grandes atractivos de Camboya son sus templos: es imposible visitar el país sin pasar por el famoso templo de Angkor, uno de los lugares más importantes ya no solo del país, sino de todo Asia. Pero lo que más abunda en este país asiático es la permanente sonrisa de sus ciudadanos, que rebosan de optimismo y generosidad.