En esta vida casi todo es cuestión de gustos, a veces lo que es mejor para uno no lo es para otro y viceversa. Pero los estudios tienden a encontrar cosas que, por lo general, son mejores para la mayoría de las personas. Y en nuestra sociedad de consumo se hacen estudios de muchas cuestiones. Por ejemplo, el comparador de vuelos Skyscanner, elaboró un estudio para el cual entrevistó a mil viajeros buscando cual era según ellos el mejor asiento para viajar en un avión, el ganador sin lugar a dudas fue el asiento 6A. Aunque dicho así puede sonar un poco aleatorio hay una serie de causas detrás de la elección.
Según el mismo estudio el 46% de los pasajeros prefiere viajar en las seis primeras filas, los motivos para esto son la mayor facilidad a la hora de desembarcar, que es una zona donde se escucha menos el ruido que hacen los motores y la posibilidad de escoger antes el menú.
Otro porcentaje importante de pasajeros prefiere los asientos próximos a las alas, esto responde a que en esa zona se sienten menos las turbulencias. El 60% de los encuestados se decantaba por asientos de ventanilla, pero si se trata de personas que tienen que ir a menudo al baño, evidentemente entonces prefieren pasillo.
Y sí, en la misma encuesta salía cuál era la butaca peor parada, es decir la menos querida, esta es la situada en el dentro de la parte de atrás del avión, concretamente la 31E.
Entonces ¿cuáles son los mejores asientos del avión?
Queda claro que conseguir el mejor asiento del avión es una cuestión relativa, que responde a las preferencias del usuario y al criterio que según él se imponga a los demás a la hora de efectuar la elección.
A la hora de elegir asiento en el avión, como cuando vamos a un cine o un teatro de butacas numeradas, la primera condición es conocer la disposición interior del avión. Para ello existe una opción cómoda que es introducir los datos del vuelo en la página web SeatGuru, nos permitirá ver el plano del avión, incluida la cabina y la disposición de los asientos.
Pero no se limita a esto, también nos da datos sobre el espacio entre butacas y sobre las opciones de entretenimiento y otras variables, determinando según sus propios criterios las que considera mejores o peores butacas.
Evidentemente, la primera diferencia la marcará la clase en la que decidamos viajar, pero después también podemos establecer diferencias a igual precio.
Comodidad
Si lo que buscamos es más comodidad podemos intentar conseguir las butacas que están más cerca de las salidas de emergencia o en la primera fila entre secciones. También es cierto que en principio estas butacas costarán un poco más, a no ser que queden libres a última hora, y que las que se sitúan entre secciones suelen ser aquellas donde también se colocan las cunas de los bebés.
Si no consigues ninguna de estas para estirar las piernas siempre es mejor seleccionar las butacas al lado del pasillo. Si se trata de un vuelo largo es muy recomendable que elijas algunos de estos asientos y, los consigas o no, es importante que realices ejercicios para vuelos largos en avión, de esta manera no se te entumecerán las piernas.
Ruido
Si lo que buscamos es el asiento más silencioso del avión para poder descansar con facilidad, entonces tendremos que decantarnos por los asientos de las filas delanteras que son los más lejanos a los motores. En caso de no conseguir esto no está demás saber que los asientos de pasillo son un poco más silenciosos que los de ventanilla. Pero si no quieres que tus vecinos te molesten entonces la ventanilla es tu opción.
Seguridad
Los accidentes aéreos son raros, pero desgraciadamente, si ocurre uno el índice de supervivencia es bajo. Aun así, un estudio realizado por la revista Time determinó que la parte más segura del avión es la trasera.
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